A la oposición interna y externa al gobierno del Presidente Danilo Medina, le convendría repasar de vez en cuando el ya famoso e histórico programa de televisión donde este no solo reenvió mínimo para el mes de marzo para hablar de tema de la reelección, sino que también se declaró como un político de ¨mecha larga¨, lo que quiere decir que no reacciona intempestivamente a los problemas inherentes al ejercicio público más bien sabe esperar a que se desarrollen los acontecimientos.
Durante varios días la turba ensoberbecida de las redes sociales, comandadas por los desesperados de siempre, armaron un tema con el documento de las Naciones Unidas que sobre la migración será presentado en Marruecos la próxima semana, planteando algunos las posiciones extremistas y delirantes de siempre, sin tener en cuenta que nuestro presidente era quien tenía la última palabra sobre ese tema y no se había referido en ningún momento a la posición oficial del país.
Parece que a estos obtusos se les olvidó, que fue al gobierno de Danilo a quien le estalló en todos los organismos internacionales en los cuales participa la República Dominicana, una crisis donde se nos aisló a partir del conocimiento de la sentencia 168-13 de nuestro Tribunal Constitucional donde se ratificaba que el derecho de nacimiento como dominicano no se aplicaba a los nacidos en nuestro territorio hijos de migrante ilegales.
Es decir, es este mismo presidente el que tuvo que vérselas con las condenas y las presiones de la Corte Interamericana de los Derechos Humanos, el Consejo de los Derechos Humanos de las Naciones Unidas, el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR), el CARICOM, Human Rights Watch, Amnistía Internacional, y que hace solo 3 años aparecía la República Dominicana pintada con los colores y la svástica símbolo de los nazis en el periódico El País de España.
Fue durante el gobierno de Danilo Medina donde el anterior embajador de los Estados Unidos de America, Mr. Wally Brewster, envió a la jefa de su oficina consular a pedirle el pasaporte y cancelarle la visa de entra a ese país a Roberto Rosario y a toda su familia, porque en la Junta Central Electoral se negaron a satisfacer los deseos públicos, porque ese señor no utilizaba los canales diplomáticos sino los medios de prensa, para presionar buscando que se variara la posición en cuando a la sentencia 168-13.
También se les olvidó a las fantasiosos y tabuladores, que fue este mismo presidente quien se enfrentó de mala manera en una reunión de la CELAC efectuada en La Habana, a tal Ralph Gonzalves quien acusó públicamente a los dominicanos de ser racistas y xenófobos, de violar los derechos humanos de los haitianos, y le pidió a este individuo que en ese momento presidía las islas San Vicente y Granadinas, que no se metiera en los asuntos internos de la República Dominicana.
También fue el gobierno de Danilo, el que tuvo que enfrentar en su momento la propuesta que se llevó al seno de Cariforum, donde se asocian los estados del Caribe, de que se nos expulsara por violar lo que ellos decían eran los derechos de nacionales haitianos nacidos en el país, así como también se pidió se nos expulsara del acuerdo de Petrocaribe por esas mismas razones y por eso se tuvo que enviar de urgencia a varios funcionarios del gobierno a Caracas para hacer nuestra defensa.
Pero no solo organizaciones internacionales y foros de todo tipo donde se nos acusaba de racistas, en su momento este mismo gobierno que preside Danilo Medina, recibió andanadas de acusaciones de escritores e intelectuales, el más notable de todos ellos fue le Premio Nobel de literatura de nacionalidad peruana Mario Vargas Llosa, quien hasta comparó la sentencia de nuestro TC con las leyes dictadas por el partido nazi en Alemania cuando se despojó de la nacionalidad de ese país a los judíos y sus descendientes.
E incluso algunos intelectuales dominicanos como los escritores Julia Álvarez y Junot Díaz, ambos residentes en los Estados Unidos, acusaron a nuestro país y su gobierno de ser unos abusadores y racistas, en un artículo que publicaron junto con escritores de origen haitiano, donde asemejan la situación del país con este tema a lo que ocurrió con la ¨limpieza étnica¨ de la guerra de los Balcanes y la situación de los negros en Sudáfrica sometidos a la política del apartheid.
Este resumen es solo para recordar que si en algo tiene un postgrado el Presidente Danilo Medina es en sortear el tema de los haitianos que viven en la República Dominicana, y sus hechos demuestran que en cada ocasión en que le ha tocado enfrentar una crisis, ha actuado apegado al interés nacional, siempre con la inteligencia y el tacto que merece un tema tan sensible y donde tantos buitres están volando sobre nuestras cabezas esperando que nos equivoquemos para saltarnos encima.
Por no leer los antecedentes, a la oposición política interna y externa del actual gobierno, se le olvidó que Danilo es un experto en este tema, el cual tuvo que aprendérselo a base de presiones nunca ejercidas anteriormente sobre ningún gobierno dominicano, y que por lo tanto cuando tuviera que tomar una decisión sobre adherir o no con su firma el documento que sobre migración de las Naciones Unidas, que es más un relato de intenciones aéreas que medidas efectivas, iba a leer hasta las letras más pequeñas.
La República Dominicana por su posición geográfica y compartir una isla pequeña con el país más pobre de occidente tiene una situación especial en cuando a la migración hacia su territorio, pero a su vez además de que somos vecinos de la principal economía del mundo tenemos fuertes lazos con España y otros países de habla hispana, lo que nos ha convertido en exportadores netos de migrantes hacia países con mayor grado de desarrollo que el nuestro.
Estamos entonces incluidos en el documento de las ONU a ser firmado en Marruecos por las dos bandas, somos, como bien lo dice el comunicado dado a conocer por la Presidencia de la República, receptores y emisores de migrantes, al final la migración de los seres humanos es algo tan natural como la vida en sobre la superficie del planeta, sin embargo nuestro gobierno asume que atenta contra el interés nacional.
Mas perjuicios que beneficios es la conclusión del gobierno dominicano, los funcionarios del área y nuestro presidente, que a fin de cuentas y de acuerdo al texto de nuestra Constitución es el responsable final de las relaciones exteriores de la República Dominicana, por eso no estaremos presentes en Marruecos y no adherimos al Pacto sobre Migración de la ONU, tan sencillo como eso.