SANTO DOMINGO.- Según revelan los datos del expediente de la investigación por el Ministerio Público, la menor de 16 años de edad, hijastra del comunicador Pablo Ross, no quería que lo denunciaran de incesto por temor a un escándalo, ya que él es una figura pública y perjudicaría a su madre.
Así se hace constar en la denuncia presentada en contra del locutor, por un pastor de iglesia cristiana, cuyo nombre se omite para proteger la integridad de la víctima.
En la instancia el padre de la menor alegó que su hija había estado siendo agredida sexualmente por el mercadólogo, mientras vivía en la casa de su madre, ubicada en el sector de Bella Vista, hecho que ocurría desde hace cinco años.
El padre de la menor en la denuncia presentada por ante la Unidad de Prevención y persecución de la Violencia de Género Intrafamiliar Delitos Sexuales, refirió que habló con su hija sobre el tema, manifestándole que si había sido agredida por el comunicador.
Mientras que un interrogatorio practicado a la menor esta relató que Pablo Ross, la agredía sexualmente, tras señalar que eso inició mientras ella cursaba el 5to o 6to de básica, a modo de conversaciones insinuantes y abrazos incómodos.
Empero, explicó que eso no ocurría de manera frecuente, pero luego en verano de 2017 esas acciones se fueron intensificando, empezaron los besos en los pies, en el cuello, y las conversaciones eran más insinuantes.
Agregó que ella empezó a tomar conciencia sobre lo que estaba pasando con su padrastro, luego de que se lo comentó a su novio en este 2018, al tiempo de manifestar sentir sentimientos de culpa relacionados con la situación denunciada, ya que no quiere que encarcelen a su padrastro por su hermanita menor.
“Lo más significativo que hizo mi padrastro fue agarrarme en una ocasión el cachete de las nalgas, los besos mojados en el cuello, los toques por encima de la ropa en los senos y en una ocasión un toque rápido por encima de la ropa en su vagina”, acotó la menor cuyo nombre se omite por razones legales.
Relató que la primera en enterarse de la situación fue su psicóloga, luego una amiga de la iglesia y la pastora de la juventud de su iglesia, después su madre, quien trabaja como administradora para una organización sin fines de lucro y posteriormente su padre.
El Juez de Atención de la Pena impuso tres meses como medidas de coerción al comunicador Pablo Roos los cuales tendrá que cumplirlo en la cárcel Najayo Hombre.
Fuente Listíndiario