ARECIBO, PUERTO RICO. - Un homenaje a ritmo de bohemia y fiesta de pueblo reunió a representantes de organizaciones sociales, músicos, artistas y seguidores del bolero para recordar la vida y legado del cantante y bolerista puertorriqueño, Cheíto González.
El líder cívico Tito Correa, presidente del Club de Cheistas en Arecibo, Puerto Rico, destacó que González es una figura icónica en el género del bolero de todos los tiempos, con aportes invaluables por su calidad como cantante e interprete.
“Este gran bolerista ya era famoso en el New York de los años 50 y luego en México, la meca de la canción romántica. Tiene el mérito de haber grabado unas 300 canciones con distintos tríos y orquestas, en una carrera artística muy corta, porque murió con solo 27 años de edad”, señaló.
“Su voz natural distinguió por su versatilidad, potencia y afinación. Tenía también una dicción impecable y una magia especial para interpretar el bolero. Hacía primera, segunda y tercera voz”, expresó Correa.
Por esas razones, a 56 años de su muerte, las canciones de “El Jilguero Arecibeño”, figuran entre las más solicitadas en emisoras dedicadas al bolero y también en las velloneras de Puerto Rico, New York, México y otros países con cultura musical de trío.
Según indica una nota llegada a la redacción de eluniversaldigital.net el alcalde de Arecibo, Carlos Molina, encabezó la actividad realizada en la Plaza del pueblo, que trajo música de trío a los asistentes.
Como cantante Cheito González logró una amplia discografía. También evolucionó la manera de cantar bolero, incorporando el estilo de darle más fuerza a la primera voz. En el mundo de la canción catalogan a Cheito González como uno de los mejores cantantes populares puertorriqueños del siglo 20.
En su carrera, obtuvo gran éxito con las canciones “Cristal”, “Egoismo”, “Fruto Amargo”, Frenesí”, “Cuando estemos viejos”, “Entre tu amor y mi amor”, “El malquerido”, “Silencio”.