SANTO DOMINGO.- El gobernador del Banco Central de la República Dominicana (BCRD), Héctor Valdez Albizu, restó importancia a la depreciación que está registrándose el peso dominicano en comparación con el dólar.
El funcionario del Banco Central dijo que una depreciación del peso dominicano por el orden del 3.5 %, que es el registro de los últimos año, no es importante.
“Una depreciación de 3.5 % no es nada. Una tasa (del dólar) de RD$50... yo la empujé para que se ajustara a los requerimientos, porque si no se nos van a ir los capitales para afuera”, dijo el funcionario tras ofrecer un discurso en el acto por el 71 aniversario del BCRD.
La cotización sobrepasó la barrera de los RD$50 por dólar estadounidense a fines de la semana pasada, y este martes estaba en RD$50.03 por cada dólar.
Valdez Albizu dijo que los bancos tienen suficiente flujo de divisas para atender la demanda por la temporada navideña que se avecina.
Durante su discurso, el gobernador del BCRD reportó que la economía, de acuerdo con cifras preliminares, creció 6.9 % entre enero y septiembre de este año, impulsada por un dinamismo mayor en septiembre, cuando el Indicador Mensual de Actividad Económica (IMAE) aumentó 8.6 % comparado con igual mes del año pasado, cuando la economía dominicana fue “ralentizada como consecuencia de las tormentas Irma y María”, aclaró.
Las actividades económicas que más crecimiento han registrado en nueve meses, según enumeró Valdez Albizu, fueron las zonas francas (12 %), la construcción 10.9 %, el comercio (8.9 %) y la salud (8.7 %). El único sector económico en números rojos es la explotación de minas y canteras, que decreció -2.1 % durante ese lapso.
El gobernador del BCRD rechazó los señalamientos que indican que el crecimiento de la economía dominicana se sustenta en el endeudamiento y dijo que el principal responsable de empujar la economía es “el aporte del pujante sector privado”.
El peligro, señaló, está en la tendencia alcista de los precios petroleros y al impacto que pueda tener una mayor subida de las tasas de interés doméstica y la de política monetaria en Estados Unidos.