La selección española certificó su pase a octavos en Kaliningrado tras empatar (2-2) con Marruecos en un partido intenso y vistoso, donde el equipo magrebí jugó con garra in choque donde no se jugaba nada.
En un desenlace lleno de suspense, el gol del español Aspas en el descuento, unido al empate in extremis de Irán en su choque con Portugal, dio a la Roja el primer puesto del grupo B. En octavos ya espera Rusia.