SANTO DOMINGO.- El expresidente de la República, Leonel Fernández encabezó ayer una caravana y recorrió diversos sectores del municipio Los Alcarrrizos a ritmo de “El León está vivito y coleando, con Leonel Fernández es pal’ 20 que vamos”.
En principio se trataba de dos visitas a dirigentes fundadores del Partido de la Liberación Dominicana (PLD), pero a su llegada a la entrada de la demarcación, lo esperó una multitud.
A medida en que el presidente del PLD se internaba por las calles estrechas de los barrios de este municipio, se iban aglomerando numerosas personas que le mostraban su simpatía con el dedo en forma de “L”.
Fernández hizo la primera parada en la casa del fundador número 61 del PLD, Alfonso Soto, ubicada en la calle Primera número 33 de la Manzana 17, del barrio Invi de aquí, donde lo esperó una multitud que decía una y otra vez, “y ruge, ruge, el León”.
Allí permaneció unos 20 minutos y luego continuó su recorrido a la casa del señor Luis Ernesto Pimentel, quien habita en la urbanización Los Cerros de aquí, donde también permaneció alrededor de 25 minutos.
En este punto lo esperaron numerosas personas que se agolpaban unos y otros, con la intención de darle la mano.
Ayer fue la segunda “visita solidaria” que realiza Fernández a dirigentes del PLD, actividad que inició el domingo 10 de junio con el descenso a la casa de tres dirigentes del PLD en la circunscripción número 3 del Distrito Nacional.
Al igual que ayer, el inicio de las visitas solidarias convirtieron en una caravana a ritmo del spot musical “Leonel está vivito y coleando”.
La caravana de ayer inició pasadas las 5:00 de la tarde en la entrada de Los Alcarrizos y terminó en el kilómetro 18 de la Autopista Duarte.
A lo largo del recorrido de más de dos horas, Fernández repartía besos y abrazos desde la capota de su vehículo, donde iba sentado.
Igual, recibió el afecto de las personas que salieron de sus casas a las calles, balcones, los techos de sus viviendas con banderolas en mano, gorras, vestuario y señalando con sus dedos en forma de “L”.
Detrás del vehículo en el que viajaba Fernández, iba su hijo Omar Fernández, el cual descendió a las dos casas junto a su padre y dirigentes del Partido.