MADRID.- El nuevo ministro español de Cultura y Deporte, Màxim Huerta, dimitió este miércoles, apenas una semana de haber llegado al cargo, al conocerse que defraudó a Hacienda con 218.000 euros y tuvo que abonar por ello 366.000 euros.
"Me voy porque amo la Cultura", dijo Huerta, quien defendió en una comparecencia ante la prensa su inocencia y aseguró haber sido víctima de "una jauría" en referencia a las críticas recibidas.
"La inocencia no vale de nada ante esta jauría", subrayó el hasta hoy ministro de Cultura y Deporte de España.
El ya exministro de Cultura acudió al Palacio de la Moncloa, sede del Ejecutivo para presentar su dimisión al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y en su comparecencia ante la prensa dijo que "hay momentos en los que uno tiene que retirarse y yo amo la cultura".
El periódico español El Confidencial publicó hoy que Huerta fue sancionado judicialmente en 2017 por impuestos no pagados en 2006, 2007 y 2008, cuando trabajaba en televisión y declaraba sus ingresos como sociedad mercantil.
El exministro explicó ante la prensa que en esos años hizo su declaración de la renta a través de una sociedad, lo que en esos momentos estaba permitido y que suponía tributar menos que si lo hubiera hecho como renta personal.
El periodista y escritor, de 47 años, se ha convertido en el ministro que menos tiempo ha estado al frente de una cartera en España en la etapa democrática, ya que solo ha permanecido en el cargo una semana desde que jurase su cargo.