Santo Domingo.- Desde hace años se viene hablando de la cantidad de falsificaciones de obras de arte que pululan en el país.
Las obras que en algunos casos son vendidas a coleccionistas de arte extranjeros que son timados. Y no existe quién le ponga el cascabel al gato.
Según se ha informado existen instituciones con colecciones de arte en sus fondos, que podrían incluir obras de dudoso valor o legalidad.
La nueva víctima de esta penosa práctica habría sido nada más y nada menos que el Presidente Danilo Medina, quien con motivo de su visita oficial de Estado a la vecina isla de Jamaica, tuvo la excelente idea de obsequiar al mandatario de esa isla, Andrew Holness, una obra de arte supuestamente firmada por el fenecido maestro Guillo Pérez. ¡Y ojalá que siempre los presidentes regalen obras de arte! Entre otras cosas es un indicativo de la comprensión profunda del hecho cultural y de su utilidad en las relaciones internacionales. El arte acerca.
Pero, al día siguiente comenzaron tibiamente las sospechas de que algo no estaba bien del todo.
En un chat donde participan galeristas, curadores y algunos artistas, se comenzó a hablar del tema. Y fue justamente la viuda del maestro Guillo Pérez, doña Amalia Linares, quien dijo categóricamente en ese chat que esa obra era falsa. Así lo afirmaron tanto Juan Carlos Mesa como Omar Molina, ambos participantes del chat.