Santo Domingo.- El diputado Gustavo Sánchez, sometió un proyecto de ley que propone modificar el Código de Trabajo con el propósito de regular el uso de uniformes, vestimenta o cualquier otro distintivo que identifique a las y los trabajadores del área doméstica en lugares públicos.
Sánchez explicó que dicho proyecto está inspirado en el artículo 182 del Código Penal, el cual tipifica como discriminación el hecho de incurrir en cualquier trato desigual o vejatorio contra una persona en razón de su oficio.
El mismo busca devolver la dignidad de las trabajadoras de las casas de familias, las cuales a su juicio, “son expuestas en las plazas públicas con cierto nivel de marginalidad y esclavitud”, lo cual fue reprochado por el propulsor de la citada normativa.
“Nuestra propuesta respaldada en la obligación que impone la Constitución de la República al Estado Dominicano, de reconocer el trabajo en el hogar como una actividad económica que crea valor agregado, produce riquezas y bienestar social, así como también, fomenta el empleo digno”, sostuvo el legislador.
“De igual forma, el Código de Trabajo establece como derecho básico de los trabajadores el respeto a su intimidad y a su dignidad personal, correspondiendo a la ley disponer según lo requiera el interés general, todas las medidas mínimas que se consideren necesarias a favor de los trabajadores. Incluyendo regulaciones especiales para el trabajo a domicilio”, agregó el diputado del PLD.
El también vocero de los diputados del PLD llamó la atención de aquellas personas que ostentan el privilegio de tener un personal a su servicio al cual se les exige entre sus obligaciones, el uso en espacios públicos, de un vestuario que evidencie su condición laboral, lo que a su juicio, es una imposición que puede llegar a generar sentimientos de inferioridad y marginalidad con respecto al resto de la población.
“Creemos que la sociedad dominicana debe considerar esta situación como una exposición pública injustificable, con riegos de generar discriminación en el entorno que les rodea. Si bien nuestra propuesta puede parecer una simple y sencilla modificación por adición a la ley 16-92, lo cierto es que está cargada de un alto significado social, puesto que representa el reconocimiento y apoyo a las trabajadoras del área doméstica.
El proyecto de ley que limita el uso de uniformes a empleados y empleadas domésticas en espacios públicos, para asegurar su cumplimiento, recomienda tipificar como falta grave su desconocimiento y de aprobarse el mismo, sancionará su violación con multas desde tres a seis salarios mínimos (de 30 a 60 mil pesos dominicanos), de conformidad con el numeral 2 del artículo 721 de la ley 16-91 del Código de Trabajo.