Santo Domingo.- Diputados de las diferentes bancadas tienen opiniones encontradas en relación a la inhibición que solicitó la presidenta de la Segunda Sala Penal de la Suprema Corte de Justicia (SCJ), Miriam Germán Brito, para que no sea tomada en cuenta en la conformación del pleno, que pudiera ventilar los expedientes de los señalados como sobornados de Odebrecht en caso que llegue a esa jurisdicción.
La presidenta de la Segunda Sala de la Suprema Corte de Justicia, Miriam Germán Brito, pidió ayer no ser considerada como jueza de la instrucción especial, ni como miembro del pleno, en caso de que el proceso por los sobornos de Odebrecht llegue al máximo tribunal del país.
En una misiva enviada ayer al presidente de la SCJ, Mariano Germán Mejía, la magistrada Germán Brito resaltó que a través de unos tuits “se ha desatado una serie de comentarios atribuyéndome una estrecha amistad con el señor Víctor Díaz, lo conozco, he conversado con él, nunca sobre un proceso en el que ni siquiera nadie ha sido formalmente imputado”.
En ese sentido el diputado Elpidio Báez del PLD consideró que fue una postura inteligente ante los cuestionamientos realizados por su supuesto vínculos y amistad con el exministro de Obras Públicas, Víctor Díaz, quien fue interrogado por la Procuraduría General de la República en torno al caso Odebrecht.
Báez indicó que Germán Brito se está alejando de un rumor público y de una recusación que se le pueda realizar.
“Ella es reputada como una magistrada honorable y seria, así como una persona de conducta ética, reconocida por la sociedad. Ella no quiere verse salpicada por señalamientos en caso de que SCJ decida que participe en juzgar algún funcionario vinculado a los sobornos de Odebrecht”, apuntó.
Mientras que el diputado por el Partido Revolucionario Moderno, Jean Luis Rodríguez, indicó que la decisión de German Brito fue prudente y atinada desde una perspectiva, debido a los cuestionamientos que se han realizado en torno a su reunión con un exfuncionario bajo investigación por soborno.
En tanto que el también legislador por el PRM, Darío de Jesús Zapata, manifestó como una decisión lamentable, debido a que Miriam Germán Brito tiene toda la credibilidad y la confianza del país, para ser parte de los magistrados que conozcan los actos de corrupción, especialmente, el de sobornos de Odebrecht.
Zapata añadió que German Brito debe valorar su postura de apartarse de los jueces que podrían conocer el caso de los sobornos de Odebrecht, donde el país demanda que se resuelva el escándalo de corrupción.
En ese mismo sentido Elías Báez del bloque opositor, expuso que fue una medida errada de la jueza: “Si sacamos los jueces de carrera para conocer este caso de sobornos de Odebrecht, entonces lo asumirán los magistrado políticos en esa alta corte”, puntualizó.
Señaló que si existe una campaña de descredito contra Germán Brito, y ella le hace el “coro” renunciando va a pasar lo mismo que con otros casos de corrupción en los tribunales, “que los magistrados políticos defenderán y descargarán a los funcionarios requerido y acusados”, aseguró.
El diputado oficialista, Demóstenes Martínez, expuso que cuando un juez toma la decisión de inhibirse o solicitarle al tribunal no tomarlo en cuenta para conformar una sala, debe ser considerada por el pleno de la SCJ.
Martínez precisó que Germán Brito es la magistrada en el país con mayor tradición jurídica de credibilidad y honestidad.
“cuando ella pide se excluida de cualquier proceso vinculado a los sobornos de Odebrecht, lo hace por estar un poco influenciada por la críticas realizadas por los medios de comunicación y a la vez cuidando el sistema de justicia a pedido no se tomada en cuenta para conformar un tribunal que conduzca este caso”, aclaró.